Las personas somos somos bombardeados por anuncios e imágenes de distintos tipos de shampoo: para cabello maltratado, para cabello seco, para cabello teñido o cortado, para fortalecerlo o para evitar su caída etc. Y nosotros, a veces sin preguntarnos invertimos fuertes cantidades de dinero sin saber siquiera cómo es que funciona este tan cotidiano producto.

Pero alguna vez te has preguntado ¿Qué es el shampoo y para qué sirve?

El shampoo, que comercialmente ha sido distribuido y utilizado desde el siglo 18 fue diseñado para cuidar el cabello, lavarlo, remover suciedad, impurezas y sebo así como escamas de piel y demás cosas que invaden nuestro cuero cabelludo.

¿Por qué no utilizar jabón?

Para comprender esto primero debemos entender cómo funciona el cuero cabelludo; este segrega un aceite o sebo a través de los folículos pilosos con el fin de proteger al cabello contra daños exteriores, pero desgraciadamente el cebo y su natural consistencia tiene a atrapar todo lo que está a su paso: Celulas muertas, caspa y demas cosas producidas por nuestro cuerpo y también elementos externos como polvo, o cosas que nosotros mismos aplicamos como el gel o perfumes.

El shampoo cuenta con surfactantes, el cual tiene la propiedad de solo separar los aceites naturales del cabello de manera sencilla llevándose solo el cebo y la suciedad atrapado en él, por otra parte el jabón es mas abrasivo y se mezcla más fácil con el cebo el cual logra en ocasiones retirarlo todo, causando diversos problemas como resequedad y dejando sin ninguna protección natural a nuestro cabello.

Además la naturaleza “grasosa” del cabello logra hacerlo impermeable haciendo que sea casi imposible lavarlo solo con agua.

Entonces si el shampoo es para limpiar el cabello ¿Todas las variedades del Shampoo para qué sirven?

Hay distintas condiciones del cabello que varían de persona en persona, como lo pueden ser cantidad de grasa o el mismo maltrato que le da cada uno de ellas, para eso y gracias a los distintos descubrimientos y propiedades de los productos pueden ayudar, siempre y cuando el cabello esta dentro de lo que cabe “sano”.

Si la condición de tu cabello no es favorable o en verdad esta mal, lo más recomendable es acudir a un especialista que además de darte un correcto diagnostico te recomendara el shampoo o medicamento indicado y profesional para tú caso, pues desafortunadamente las grandes cadenas comerciales y sus shampoos no dan los resultados presumidos en sus productos.